En el mundo, alrededor de 281 millones de personas viven y trabajan fuera de sus países de origen, quienes se enfrentan a una serie de dificultades, principalmente los migrantes irregulares, como trabajo forzado, bajos salarios y barreras jurídicas y prácticas en cuanto a libertad de asociación, advirtieron el Comité de la ONU para la Protección de los Derechos de Todos los Trabajadores Migratorios y de sus Familiares (CMW, por sus siglas en inglés), y otras agencias de las Naciones Unidas.

Estimaciones de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) advierten que los trabajadores migrantes ganan aproximadamente 13 por ciento menos que los nacionales en países de ingresos altos. Cuando se compara a las mujeres migrantes trabajadoras con los hombres nacionales, esa brecha alcanza el 19 por ciento, aseguró Gladys Cisneros, jefa de División de la OIT para la Migración.

En la presentación de la Observación General número 6 del citado comité, recordó que los trabajadores migrantes tienen tres veces más probabilidades que los nacionales de encontrarse en situaciones de trabajo forzado. “La explotación de migrantes genera aproximadamente 37 mil millones de dólares en ganancias ilícitas cada año”.

Dichos ejemplos, enfatizó, sólo resaltan la urgencia de proteger los derechos de esta población. 

Al inaugurar la sesión, Fatimata Diallo, presidenta del CMW, expuso que la migración contemporánea es un fenómeno cada vez más complejo, ya sea por quiénes son las personas que se desplazan, las razones por la que lo hacen o la forma en la que migran. Esta población, mencionó, “son el síntoma y la consecuencia de las presiones, los cambios sociales y económicos y también ambientales”.

Explicó que los migrantes, en particular los que se encuentran en situación irregular, se exponen de manera desproporcionada a los abusos y a las violaciones de derechos humanos, en particular la discriminación, la marginalización, la explotación, la violencia y la xenofobia. 

“Los controles en la frontera son cada vez más estrictos y las vías regulares para entrar y permanecer en los países cada vez se reducen más. Los viajes de los migrantes son más largos, más fragmentados y más peligrosos”, alertó. En este sentido, refirió que entre 2014 y 2021 más de 40 mil mujeres, hombres y niños murieron o desaparecieron a lo largo de la ruta migratoria. 

“Muchas otras desapariciones nunca se han siquiera reportado o informado. El lugar donde se encuentran es desconocido y los cadáveres no se han recuperado nunca. La cifra de récord de 8 mil 900 personas fallecidas en las rutas migratorias fue precisamente en el año 2024”, enfatizó. 

Diallo lamentó que frente a este contexto la migración se aborde principalmente desde el prisma del desarrollo económico, la seguridad y el control de las fronteras. “La retórica inflamatoria y xenófoba contra los migrantes, ayuda a los políticos a acumular votos y en tiempos de crisis son un chivo expiatorio fácil a quien imputar las dificultades socioeconómicas de un país dado”, subrayó.

Por eso, destacó que la observación general número 6 establece pistas que contribuyen a la coordinación complementaria para la protección convergente de los derechos de los trabajadores migrantes y sus familiares mediante la Convención internacional para la protección de los derechos de los trabajadores migrantes y los miembros de sus familias y el Partido Mundial para la Migración Segura, Ordenada e Irregular.

En su turno, Fernando Espinoza Olvera, vice representante de México ante la oficina de ONU en Ginebra, destacó que al ser el país uno de origen, tránsito, destino y retorno de personas migrantes, “conoce bien los desafíos que implica gestionar la movilidad humana, pero también está convencido de las oportunidades y beneficios que ésta trae consigo si se atiende de manera adecuada”. 

Es precisamente esta experiencia, dijo, la que ha llevado a México “a desempeñar un papel de liderazgo en la construcción de marcos internacionales que buscan garantizar la protección y respeto de los derechos de las personas migrantes, sin importar su situación migratoria, así como una migración segura, ordenada, regular, pero sobre todo humana”.

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