Madrid. El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, ha firmado este viernes un decreto por el que Ankara suspende la aplicación del Tratado de Fuerzas Armadas Convencionales en Europa (FACE) después de que Rusia anunciara su salida en noviembre de 2023 en el marco de la invasión rusa de Ucrania.

El portavoz del Ministerio de Exteriores, Oncu Keçeli, ha dicho que tras la salida de Moscú “no es posible continuar con la implementación” del tratado, si bien ha precisado que esta decisión es “reversible”, ha informado la agencia de noticias Anatolia.

En concreto, la decisión entrará en vigor a partir del 8 de abril, según reza el decreto. La decisión de Moscú de retirar su participación del tratado precipitó que varios aliados de la OTAN, entre ellos Estados Unidos, anunciaran también su salida.

El FACE se concibió en la etapa final de la Guerra Fría como dique de contención para la expansión armamentística de la Unión Soviética, con una equiparación de capacidades entre el bloque de la OTAN y los países del Pacto de Varsovia.

El tratado fue suscrito en París en 1990 por los 16 países miembros de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) de entonces y seis Estados del pacto de Varsovia. Nueve años después, se firmó en Estambul, Turquía, un texto actualizado del tratado tras la disolución del pacto de Varsovia en 1991.

El acuerdo limita la cantidad de tanques, vehículos acorazados, aviones de combate, helicópteros y artillería pesada en el territorio de los países signatarios.

 

Compartir