Madrid. El presidente del gobierno español, el socialista Pedro Sánchez, compareció ante el Congreso de los Diputados para explicar su gestión durante la catástrofe natural provocada por las lluvias torrenciales en varias comunidades autónomas españolas, sobre todo en Valencia, donde se registraron 222 muertos, cinco desaparecidos y decenas de miles de damnificados. Casi un mes después de los hechos, el mandatario español compareció ante el Parlamento, donde señaló al presidente autonómico valenciano, el derechista Carlos Mazón, por “no haber estado a la altura” y anunció una nueva fase de inversión pública en la reconstrucción de la región, de más de dos mil 200 millones de euros.
Casi cuatro semanas después de la tragedia, el presidente Sánchez explicó en sede parlamentaria la actuación de su gobierno, muy señalado por los damnificados por la tardanza en el despliegue de los unidades militares especializadas en emergencias de este tipo y por la falta de coordinación de los distintos cuerpos enviados a la zona del desastre. El mandatario español insistió en que “las competencias” en las tareas de auxilio y reconstrucción eran de las comunidades autónomas afectadas, en este caso de la Comunidad Valenciana, de Andalucía, Cataluña, Aragón, Murcia y de Castilla-La Mancha, si bien el epicentro de la tragedia se registró en las localidades situadas en las inmediaciones de la ciudad de Valencia, en pueblos como Paiporta, Chiva o Bennetusser.
En su comparecencia, Sánchez señaló que “el gobierno de España está haciendo un esfuerzo titánico” para que lleguen las ayudas lo antes posible, al tiempo que anunció que este jueves se aprobará un nuevo paquete de 60 medidas por dos mil 264 millones de euros, con lo que en total el gobierno central ya ha movilizado 16 mil 600 millones de euros para la reconstrucción.
Además, Sánchez señaló a los responsables autonómicos: “El sistema no ha fallado, han fallado personas, algunas con altas posiciones y habrá tiempo para depurar negligencias y responsabilidades. Sus responsables tendrán que asumir su culpa”, señaló.
Durante el debate, el líder de la oposición, el derechista Alberto Núñez Feijóo, le replicó que se había “parapetado detrás de la tragedia para tapar la peste de corrupción que le rodea”, en alusión a los casos que está investigando la justicia que afectan a su ex mano derecha y ex ministro de Fomento, José Luis Ábalos, a su esposa, Begoña Gómez y a su hermano, David Sánchez. Feijóo fue más allá y afirmó que “déjese de mentiras, sabían lo que iba a pasar y se quedaron de brazos cruzados. Ustedes se coordinaron para desentenderse”.
Crisis en el socialismo madrileño
Mientras tanto, en el Partido Socialista de Madrid (PSM) estalló una crisis que se saldó con la dimisión del líder regional, Juan Lobato, tras su enfrentamiento con los máximos dirigentes del PSOE que le exigieron su dimisión del cargo tras haber difundido una serie de comunicación con funcionarios de la presidencia del gobierno relacionadas con información confidencial del caso judicial que afecta al novia de la presidenta de la Comunidad de Madrid, la derechista Isabel Díaz Ayuso. La cúpula del partido busca renovar el liderazgo del socialista madrileño, con el nombramiento de Óscar López, actual ministro de Transformación Digital.
