Lima. El expresidente peruano Pedro Castillo (2021-2022) negó el jueves en una audiencia ante la Corte Suprema de Justicia los cargos de rebelión que le imputan, por su fallido intento de decretar un “gobierno de excepción” en diciembre de 2022.
“Se me acusa de cometer un delito que no cometí. ¿En qué parte del Código Penal o de la Constitución se menciona el golpe de Estado? No he cometido el delito de rebelión. Simplemente leí un documento sin ninguna consecuencia (…) ¿Desde cuándo leer un discurso se convierte en un delito de rebelión?”, dijo Castillo ante la justicia.
La defensa del exmandatario busca la anulación del proceso por el presunto delito de rebelión, a partir de su anuncio en televisión nacional sobre el establecimiento de un “gobierno de excepción”, que incluía la toma del Congreso, el Ministerio Público, el Poder Judicial y el Tribunal Constitucional.
Por esta acción, el Parlamento procedió a destituir a Castillo y nombrar como jefe de Estado a su entonces vicepresidenta, Dina Boluarte, y luego, a pedido de la fiscalía, le fueron dictados 36 meses de prisión preventiva, los cuales cumple en un penal de Lima.
El juez de la Corte Suprema, Juan Carlos Checkley, anunció que el 21 de mayo tendrá lugar una audiencia para resolver el pedido de la defensa de Castillo.
