Londres. Los precios mundiales del café se dispararon a su nivel más alto en casi 50 años debido al mal tiempo en Brasil y Vietnam, obligando a tostadores como Nestlé a subir los precios y a los consumidores a buscar alternativas más baratas.

El aumento de los precios, que el miércoles subían más de 2 por ciento, a 3,01 dólares por libra, beneficiará a los agricultores con la cosecha de este año, pero supondrá un reto para los comerciantes, que se enfrentan a costos de cobertura agobiantes en las bolsas y a una lucha por recibir los granos que compraron por adelantado.

Los problemas de producción relacionados con el mal tiempo han provocado que la oferta mundial sea inferior a la demanda desde hace tres años, lo que ha agotado las existencias y llevó los precios de referencia en la bolsa ICE a un máximo de 3.36 dólares por libra a fines de noviembre.

La última vez que el café cotizó tan alto fue en 1977, cuando la nieve destruyó gran parte de las plantaciones brasileñas. Sin embargo, entonces el impacto para los consumidores fue mucho mayor. Si se ajusta a la inflación, 3.36 dólares por libra en 1977 equivaldrían a 17.68 dólares en la actualidad.

Los expertos, además, pronostican otro año más de escasa producción de café.

Brasil, que produce casi la mitad de la producción mundial de arábica –granos de alta calidad utilizados principalmente en mezclas tostadas y molidas– ha sufrido este año una de las peores sequías de las que se tenga registro.

Aunque las lluvias llegaron por fin en octubre, la humedad del suelo sigue siendo baja y los expertos afirman que los árboles producen demasiadas hojas y muy pocas de las flores que se convierten en granos.

En Vietnam, que produce alrededor de 40 por ciento de los granos de robusta que suelen utilizarse para hacer café instantáneo, a una grave sequía a principios de año siguió un exceso de lluvias desde octubre.

Los tostadores suelen comprar el café con muchos meses de antelación, lo que significa que es probable que los consumidores perciban la subida de precios en un plazo de seis a 12 meses.

Compartir
Exit mobile version