La Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio, Servicios y Turismo (Concanaco-Servytur) pidió al Senado de la República que no ratifique el cobro de 42 dólares por turista que desembarquen de cruceros a puertos mexicanos, pues impactará la economía de varios destinos como Acapulco, Guerrero, el cual aún no se recupera del paso de Otis en 2023.
En días recientes, la Cámara de Diputados aprobó la Ley Federal de Derechos, la cual eliminó la excepción prevista en la ley para visitantes de cruceros que solamente están unas horas las comunidades portuarias del territorio nacional, lo cual implica un pago de manera inmediata de un derecho de 42 dólares, alrededor de 860.56 pesos.
En una conferencia conjunta, Octavio de la Torre de Stéffano, presidente del organismo del sector terciario, así como dirigentes de varias de sus cámaras afiliadas, explicaron que un turista extranjero gasta en promedio 100 dólares al descender de la embarcación, por lo que dos quintas partes de esa derrama se irá en el impuesto, lo cual desincentiva a los viajeros.
El dirigente de la Concanaco comentó que el país no cuenta con la infraestructura para hacer ese cobro, pues tampoco se ha explicado si este será cobrado por las navieras.
De la Torre de Steffano comentó que la Concanaco ha conversado con senadores, las secretarías de Hacienda y Turismo para que se evalúe esta medida. Comentó que el llamado no se hace a nombre de las empresas que administran cruceros, sino de los artesanos, los comerciantes, las agencias de viajes, los taxistas, porque han expresado que este derecho “puede vulnerar su economía familiar”.
“No estamos en un momento para improvisaciones, ya los cruceros vivieron una crisis derivada de la inseguridad en México y esa crisis se pudo sortear con la actividad y lo que hicimos cada uno de nosotros como líderes empresariales y trabajando con el gobierno federal”, dijo.
“Este llamado es para que los senadores revisen esta medida, se dialogue y se discuta porque en aras de generar un presupuesto de ingresos para cumplir con los programas y los proyectos que establece la Federación, ese presupuesto de ingresos pudiera haber disminuido en la medida en que menos clientes lleguen a nuestros destinos”, dijo el dirigente empresarial.
Eduardo Morales, presidente de la Cámara Nacional de Comercio, Servicios y Turismo (Canaco) Cozumel comentó que esta medida fue tomadas a la ligera, porque entraría en vigor a partir de enero, por lo que no ha tiempo de planeación para ponerla en práctica y representa el incremento de más de 200 por ciento de un impuesto.
“Los que podemos sufrir (las consecuencias) son los pequeños comercios, los taxistas, las personas que están día a día no. Es un tema muy preocupante”, dijo.
José Enrique Molina, presidente de la Canaco Mérida, indicó que este impuesto frenará el proyecto de Puerto Progreso en Yucatán, pues inhibe la llegada de cruceros.
