El papa Francisco dijo el domingo que, si puede, visitará su natal Argentina en el segundo semestre de 2024, un viaje que lo llevaría a la nación sudamericana por primera vez en sus casi 11 años de papado y mientras sus compatriotas sufren económicamente.

Francisco no ha vuelto a su patria desde que fue elegido papa en 2013.

En una entrevista con el conductor del programa “Che Tempo Che Fa” de un canal televisivo italiano privado, Francisco dijo que le preocupa el pueblo argentino porque está “sufriendo mucho”, una aparente referencia a la devastada economía de la nación.

Desde su residencia en el Vaticano, el pontífice de 87 años le dijo al entrevistador que planea visitar la Polinesia en agosto y que algún tiempo después realizaría un viaje a Argentina este año.

A finales del año pasado, el papa dijo que el nuevo presidente argentino, Javier Milei, lo había invitado.

Desde hace tiempo Francisco se ha visto asediado por preguntas sobre por qué no ha vuelto a su país desde que se convirtió en papa.

Durante la campaña electoral, Milei, que dice ser un “anarcocapitalista”, dijo que Francisco era un “imbécil” por defender la justicia social. El papa, que sostuvo una larga conversación con Milei tras su victoria, ha señalado que ya lo perdonó.

Cuando le preguntaron si visitaría Argentina y si le preocupaba la situación de los argentinos, Francisco respondió: “Sí, me preocupo porque la gente está sufriendo mucho. Es un momento difícil para el país”.

En la planificación está la posibilidad de realizar un viaje (a Argentina) en la segunda parte del año”, dijo Francisco, y señaló que ese plazo toma en cuenta que el país tiene un nuevo gobierno.

Me gustaría ir”, añadió el pontífice y mencionó los “10 años” que han pasado desde que se fue.

Con una tasa de inflación anual superior al 200 por ciento, Milei ha prometido reducir las regulaciones gubernamentales y las nóminas y permitir la privatización de las industrias estatales como una forma de impulsar las exportaciones y la inversión. Los recortes ya han provocado protestas, pero Milei se ha comprometido a seguir adelante.

 

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