Ciudad de México. De acuerdo con el gobierno de Estados Unidos, “toda la migración ilícita que se maneja a través de México está controlada de una manera u otra por un cártel”. Así lo afirmó este miércoles Ian Martínez Hanna, codirector de la Fuerza de Tarea Conjunta Alpha (JTFA, por sus siglas en inglés), del Departamento de Justicia y el Departamento de Seguridad Nacional estadunidense.
Martínez Hanna destacó en una rueda de prensa virtual que el tráfico de personas desde México hacia Estados Unidos genera “ganancias exageradas” para los grupos criminales, los cuales se han adentrado profundamente en esta actividad. “En México, todos los grandes cárteles están metidos en esto”, explicó. Los principales actores en Ciudad Juárez, según el funcionario, incluyen al Cártel de Juárez, el Cártel de Sinaloa, La Línea y sus subgrupos asociados.
El funcionario subrayó que existe un “nivel muy alto de cooperación” entre los gobiernos mexicano y estadounidense para combatir este delito. En los casi cuatro años de existencia de la JTFA, se han logrado 345 detenciones relacionadas con el tráfico humano, así como más de 300 condenas criminales, muchas de ellas con penas de hasta 30 años de prisión. “Nuestro compromiso es buscar a los peores, a los cárteles y bandas que se aprovechan de la vulnerabilidad de los migrantes”, aseguró.
Explicó que este tipo de crimen organizado transnacional opera con un alto nivel de sofisticación y logística global.
Destacó que el tráfico humano puede ser incluso más rentable que el tráfico de drogas. “Un ser humano les cuesta nada a los cárteles, mientras que producir gramos de droga implica costos adicionales. Estos números reflejan la cruda realidad de las personas que son coaccionadas por los traficantes, quienes muchas veces incurren en delitos sexuales y esclavitud laboral”, indicó Martínez Hanna, que enfatizó la necesidad de imponer penas más severas para los involucrados.
Añadió que si bien las autoridades de su país y naciones como México han desarrollado estructuras para desmantelar redes criminales y rastrear los flujos financieros que sostienen este negocio ilícito, detectar estos movimientos financieros sigue siendo un desafío.
“Los cárteles cambian sus modus operandi, pero nosotros también activamos nuestros radares para enfrentarlos”, afirmó el funcionario, quien reiteró que la cooperación internacional es clave para golpear al tráfico humano. “Los vamos a encontrar, así que no crean que por estar fuera de Estados Unidos vamos a dejar de hacer nuestro trabajo”, puntualizó.