Pese a que uno de los grandes retos de México es reforzar sus instituciones, el país se encuentra ante una posición “increíble” ante el fenómeno de la relocalización de empresas, mejor conocido como nearshoring, aseguró James A. Robinson, ganador del premio Nobel de Economía 2024.
Durante su ponencia magistral en el Encuentro Amafore 2024, el también politólogo de la Universidad de Chicago explicó que actualmente el mundo, encabezado por Estados Unidos, se encuentra en una etapa de “desglobalización”, como bien se puede ver con la guerra de aranceles entre dicha nación y China.
“No queda duda de que hemos entrado en un periodo de desglobalización, con todo este tema de los aranceles. Esta situación sin duda afectará a muchos países, pero por otra parte beneficiará a otros como México, esta reconfiguración de cadenas globales, este friendshoring, es una oportunidad increíble para el crecimiento de México”, apuntó.
No obstante, es necesario avanzar en rubros como la fortaleza de las instituciones, pues como lo plantea en la investigación que lo hizo merecedor del premio, la realidad de que Nogales, Arizona es una ciudad próspera mientras que la Nogales, Sonora no lo es, a pesar de estar geográficamente juntas, recae en la solidez de las mismas.
“Para tener una economía inclusiva hay que tener un Estado que tenga fortalezas y que actúe bajo el interés colectivo. Los gobiernos tienen que trabajar para el interés del colectivo de la sociedad, debe haber un equilibrio, lo que nosotros llamamos el corredor estrecho”, dijo el economista.
Trump y China
Por otro lado, Robinson destacó que dos de los más grandes problemas que ve actualmente en el mundo son el cambio climático y el populismo, este último, dijo, regresó recientemente a Donald Trump a la Casa Blanca, alguien que, apuntó, no tiene el mínimo interés por la agenda climática: “Es aterrador, hay mucho progreso pero no es suficiente, ahora perderemos otros cuatro años, y eso pone en peligro nuestra vida en este planeta.
China floreció moviendo las instituciones financieras de una forma más exclusiva, desmantelando el comunismo, permitiendo a las personas tomar decisiones sobre su propio esfuerzo, pero Todo esto sucede bajo una dictadura comunista, pero el poder absoluto corrompe, no podemos tener una sociedad exitosa con una dictadura total.
Explicó que el crecimiento del populismo en varias partes del mundo es un indicador de la falta de creencia en la democracia, dado que la gente está perdiendo la fe en que ese camino sea el indicado para cambiar sus vidas.
Sobre China, el Nobel de Economía resaltó su impresionante crecimiento económico de las últimas décadas, el cual se ha dado a raíz de un cambio en las instituciones financieras, haciéndolas más inclusivas y desmantelando el comunismo; sin embargo, persiste el control del Estado, lo que impide la innovación total de su población.
“China ha hecho un gran progreso, pero no puede durar. Lo que vemos en la última década es una concentración de poder en el presidente Xi Jinping, y sólo hay una forma de terminar, y definitivamente no será buena, como ha pasado a lo largo de la historia con ese tipo de modelos. No creo que el dinamismo económico chino sea sustentable. En 20 años el mundo será igual, con un dominio de EU”, concluyó.