Abu Dabi. Lando Norris ganó el Gran Premio de Abu Dabi, 24 y última prueba de la temporada de Fórmula 1, mientras que su escudería, McLaren, logró el título mundial de constructores, este domingo en el circuito de Yas Marina.
“Es increíble, no por mí, sino por todo el equipo, que ha hecho un trabajo increíble teniendo en cuenta dónde empezamos. Gracias a todo el mundo en McLaren, ha sido duro pero ganar un campeonato después de 26 años es muy especial. Es un momento histórico para la escudería”, resumió Norris.
El piloto británico, líder de la carrera de principio a fin, no permitió el suspense en la pelea por el título de constructores pero Ferrari hizo un gran papel, subiendo al podio el español Carlos Sainz y el monegasco Charles Leclerc, protagonista de un recital al salir desde la posición 19 y finalizar tercero.
“Es un sentimiento agridulce, segundo era lo máximo que podía conseguir porque Lando y los McLaren eran muy rápidos”, reconoció Sainz, que se despide de Ferrari para dejar su volante a Lewis Hamilton. El español competirá con Williams.
“Ha sido muy emotivo, he hablado con mi ingeniero en la radio, y estoy muy agradecido por haber estado en este equipo cuatro años. He demostrado que puedo luchar por ‘poles’ y victorias”, dijo Sainz.
Norris firmó su cuarta victoria de la temporada y aseguró el segundo puesto de la clasificación final por delante de Leclerc.
“Sabía que tenía que tomar todos los riesgos posibles, es lo que he hecho, pero salía desde muy lejos y no lo podía hacer mejor. Duele terminar tan cerca, es una pena, pero lo hemos intentado todo”, subrayó Leclerc.
Hamilton, la leyenda de los siete títulos mundiales, se despidió de Mercedes tras 12 años y seis coronas con una sobresaliente actuación, finalizando cuarto tras superar en la última vuelta a su compañero George Russell.
Una vez más, Sergio Pérez no pudo terminar una carrera. El mexicano apenas corrió una vuelta, pero un contacto del finlandés Valtteri Bottas le hizo dar un trompo que dañó el Red Bull.
Checo sufrió así el quinto abandono de la temporada más terrible que ha vivido como piloto de la escudería de los toros rojos.
Este fue el peor escenario para cerrar una temporada en la que acumuló varios malos resultados y que ponen en riesgo su permanencia en el equipo.
Hamilton, entre lágrimas
Aunque no llegó a subir al podio, cuando Hamilton, entre lágrimas, aparcó su Flecha de Plata en el garaje recibió un homenaje, con los fuegos artificiales iluminando la noche en el circuito de Yas Marina.
A continuación, en el sexto puesto sin forzar la máquina durante todo el fin de semana, el cuatro veces campeón mundial Max Verstappen (Red Bull), que había logrado el título de pilotos el 24 de noviembre en Las Vegas.
Hasta la décima posición cayó el otro piloto de McLaren, el australiano Oscar Piastri, que sufrió un podio tras haber sido golpeado en la primera curva por Verstappen, que sufrió una penalización de diez segundos.
Un puesto por delante finalizó el español Fernando Alonso (Aston Villa).