A más de ocho meses del envío de la iniciativa presidencial para la posible extinción de la Comisión Nacional para la Mejora Continua de la Educación (Mejoredu), organismo que nació con la Cuarta Transformación, Silvia Valle Tépatl, comisionada presidenta, sale en defensa del organismo: no tiene autonomía constitucional ni nació en la época neoliberal, no impulsó la mal llamada reforma educativa, no cuentan con fideicomisos ni somos una institución de corruptos.

En entrevista con La Jornada aborda por primera vez el tema, y en un análisis, expone que tras conocer, el pasado 5 de febrero, la iniciativa presidencial para desaparecer siete organismos constitucionales autónomos, entre ellos a la Mejoredu, “nos sorprendió mucho porque esta comisión fue creada en 2019, ya en plena gestión de Andrés Manuel López Obrador. Desapareció el Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación (INEE) –a la que se le otorgó autonomía constitucional en 2013– y surgió la Mejoredu, y siempre pensamos que somos parte de esta Cuarta Transformación”.

Enfatiza: Mejoredu es un ente técnico altamente especializado que en los más de cinco años de existencia ha generado cerca de 500 publicaciones entre estudios, informes e investigaciones especializadas, así como programas y recomendaciones de política pública, actividades que, afirma, no duplican funciones de la Secretaría de Educación Pública (SEP).

Pese a ello, ni la SEP ni otros organismos especializados del sector educativo se han pronunciado por defender su existencia, como sí ocurrió con entidades como el Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI), pese a señalamientos de presunta corrupción, y que, a diferencia de la Mejoredu, sí cuenta con autonomía constitucional.

Valle Tépatl narra que en un encuentro reciente con el actual titular de la SEP, Mario Delgado Carrillo, le expusieron las condiciones de la comisión. Fue muy amable, nos escuchó, pero insistió en que habría que esperar a ver qué decidían los legisladores, pues es una iniciativa a la que él no puede dar marcha atrás. Nos dijo que esperáramos a ver qué sucede y que seguíamos en comunicación. Sólo eso.

La búsqueda de respuestas y diálogo para la permanencia de Mejoredu, afirma, se ha extendido tanto a la Cámara de Diputados como al Senado, donde ya ha establecido canales de comunicación con legisladores, a fin de exponer la labor que desarrolla la comisión.

Estar integrados en los organismos que el gobierno federal busca extinguir, insiste me sorprendió, porque nos pusieron en el mismo costalito y la comisión no es autónoma. No, no. Somos un organismo descentralizado, no tenemos las autonomías que tiene, por ejemplo, el INAI.

–Desde que se crea Mejoredu, el debate fue que no tenía autonomía. ¿Cómo explica que ahora se les incluya en este grupo de organismos?

–Desde que dijeron que iba a desaparecer, pensé: ¿Qué pasa? Creo que fue un organismo que nació sin que se hubiera querido que naciera. Se aceptó que existiera, porque no se pudo desaparecer totalmente el Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación (INEE). Fue (decir) déjenlo, dejénlo hacer, pero no existirá. Como si hubiera sido una sentencia.

Explica entonces que siendo un ente con potencial humano y académico como no lo tiene otra institución en este momento, sorprende que se busque su extinción, acción que afectaría además a 601 trabajadores, todos contratados como personal de confianza, es decir, no cuenta con una plaza de base.

Admite que la mayoría del personal, en particular quienes desarrollan las tareas de investigación, laboraron en el INEE. Venían con un chip, pero hicimos toda una labor para cambiarlo, sobre todo en los temas formación y evaluación, y lo estamos logrando, aunque a la fecha, estamos en la incertidumbre, pero no nos tambaleamos en nuestra labor.

Con un presupuesto para 2024 de 661 millones de pesos, Mejoredu fue creada el 30 de septiembre de 2019 por el decreto que expide la Ley Reglamentaria del Artículo Tercero Constitucional, con la que se regula el Sistema Nacional de Mejora Continua de la Educación, así como el organismo que lo ­coordina.

La Mejoredu fue concebida como ente público descentralizado, no sectorizado, con autonomía técnica (es decir, capacidad de tomar decisiones libres sólo en el ámbito de su competencia) operativa, presupuestaria, de decisión y de gestión, con personalidad jurídica y patrimonio propios.

Su objetivo central, señala la ley, es incidir en la mejora continua del Sistema Educativo Nacional (SEN) a través de lineamientos, criterios, sugerencias y programas, además de estudios y evaluaciones diagnósticas, formativas e integrales.

Una de sus tareas centrales es acompañar y apoyar a los distintos actores educativos en la valoración de sus procesos, en el diagnóstico de sus alcances y limitaciones, así como desarrollar estrategias y acciones de mejora, considerando la diversidad de contextos escolares que existen en el país.

Valle Tépatl subraya que entre sus competencias está tener una relación con autoridades educativas, estatales y federales, pero no operamos, no somos quienes llegamos directamente a las escuela.

Lo anterior, explica, tal como fue establecido por la reforma al artículo tercero constitucional en 2019, que significó la transformación del sistema educativo con la Nueva Escuela Mexicana y que incluyó la extinción del INEE, creado en agosto de 2002, en la administración del presidente Vicente Fox.

Admite que en su relación con la Secretaría de Educación Pública quizá faltó más coordinación, e incluso más comunicación de sus aportes para la construcción de un Sistema Nacional de Mejora ­Continua de la Educación, así ­como el estudio de temas centrales, ­entre ellos, las escuelas multigrado; el acoso y las violencias escolares, la educación indígena y la atención de niños jornaleros y migrantes.

Frente a la incertidumbre sobre si logrará subsistir o no, Valle Tépatl, destaca que pese a todo seguimos trabajando como siempre, lo que también implica entregar las proyecciones presupuestales para el organismo en 2025.

Reitera que Mejoredu le sirve al sistema educativo y ha cumplido con su labor. Por eso, no podemos entender estas decisiones políticas. Yo me siento, a veces, hasta agredida. ¿Una institución de corruptos?, no. No estamos ahí.

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