Tallin. El líder autoritario de Bielorrusia, Alexander Lukashenko, indultó a 20 personas más que, de acuerdo con activistas, son prisioneros políticos, según un comunicado de la presidencia.
El anuncio se produjo en medio de una opresión persistente en la antesala de las elecciones presidenciales del próximo mes, que probablemente extenderán el gobierno de Lukashenko, quien gobierna desde 1994.
Los funcionarios no proporcionaron los nombres de los liberados, pero el comunicado publicado en el sitio web del presidente indicó que todos ellos fueron condenados por “crímenes de naturaleza extremista”.
El comunicado mencionó que el grupo incluía a 11 mujeres y que 14 de los indultados padecían enfermedades crónicas.
“Todos los liberados se arrepintieron de sus acciones y apelaron al jefe de Estado para ser indultados”, señala el comunicado, utilizando el mismo lenguaje en otros indultos grupales en los últimos seis meses.
Este fue el octavo indulto de este tipo por parte de Lukashenko desde el verano de 2024. En total, 207 prisioneros políticos han sido liberados, según el grupo de derechos humanos bielorruso Viasna.
La mayoría fueron encarcelados tras las masivas protestas antigubernamentales de 2020, cuando Lukashenko aseguró su sexto mandato en unas elecciones que muchos consideran fraudulentas.
Según Viasna, más de mil 250 prisioneros políticos permanecen tras las rejas. No se ha liberado a ninguna figura prominente de la oposición, muchas de las cuales no se han sabido de ellas durante meses.
Entre ellos se incluye al laureado con el Premio Nobel de la Paz, fundador de Viasna, Ales Bialiatski; Siarhei Tsikhanouski, quien planeaba desafiar a Lukashenko en las urnas en 2020 pero fue encarcelado antes de la votación; y Viktar Babaryka, quien también fue encarcelado después de ganar popularidad antes de la elección.
Los indultos masivos se producen en medio de una nueva ola de represión, dijo el activista de Viasna, Pavel Sapelka, mientras Minsk se prepara para celebrar nuevas elecciones presidenciales en enero de 2025 que probablemente otorgarán a Lukashenko un séptimo mandato en el cargo.
“Lukashenko está enviando señales contradictorias (al Occidente), indultando a algunos pero encarcelando al doble de prisioneros políticos en su lugar”, dijo Sapelka. “La represión se está intensificando y las autoridades están tratando de erradicar cualquier señal de disidencia antes de las elecciones de enero”.
Las autoridades bielorrusas crean condiciones duras para los prisioneros políticos, negándoles encuentros con abogados y familiares, y privándolos de atención médica. Al menos siete prisioneros políticos han muerto tras las rejas desde 2020, según Viasna.
Lukashenko es uno de los aliados más cercanos del presidente ruso Vladímir Putin; permitió que Rusia usara el territorio bielorruso para enviar tropas a Ucrania en febrero de 2022 y para desplegar algunas de sus armas nucleares tácticas.