Ciudad de México. Ford presentó su segundo Mustang de alto performance en el transcurso de dos años: RTR; ocurrió en una exhibición en la que participó como piloto el estadunidense de 43 años de edad, bicampeón de Fórmula Drift Pro, así como presidente y fundador de RTR Vehicles, Vaughn Gittin Jr.
Antes de dar inicio al Salón del Automóvil de Detroit 2025, Gittin Jr. mostró un poco lo que se vive en el equipo RTR tras el par de campeonatos de Fórmula Drift a través de una alianza de 18 años con la firma del óvalo azul al volante del Monster Energy Ford Mustang RTR Spec 5-FD 2023.
Mustang RTR se une a la familia de autos de alto desempeño como Mustang GT Performance Package, Mustang Dark Horse y Mustang GTD. Igualmente comparte piezas con Dark Horse.
“Desde el Mustang GTD hasta el Mustang Dark Horse y el nuevo Mustang RTR, hay un pony de alto rendimiento para cada fanático y cliente de Mustang. El equipo RTR tiene tanta pasión y experiencia dentro y fuera de la pista que nos hemos asociado para desarrollar el Mustang EcoBoost más emocionante de la historia enfocado en los fanáticos”, comentó el vicepresidente de Desarrollo de Producto de Ford, Jim Baumbick.
Entre las distintas colaboraciones que han tenido Ford y RTR, destaca el desarrollo del freno de drift exclusivo para los paquetes Performance de Mustang de séptima generación. Este freno de drift electrónico fusiona la capacidad de drifting de tracción trasera de Mustang con la funcionalidad de un freno de mano mecánico tradicional.
“Estoy emocionado de tener la oportunidad de crear lo que creemos que es el Mustang turbocargado más emocionante de la historia. Está listo para drifting, carreras de aceleración, paseos por carreteras o para arrasar en un circuito de autocross“, señaló el presidente y fundador de RTR, Vaughn Gittin Jr.
El Mustang RTR estará exhibido en el Salón del Automóvil de Detroit 2025 junto al Mustang GTD Spirit of America, auto que también hizo su debut mundial en la capital de Míchigan, y que recientemente se adjudicó el récord de la vuelta más rápida cronometrada para un auto americano en el “Infierno Verde”, registrando 6.57.685 segundos, y la quinta más veloz para un auto deportivo de producción, de acuerdo con los registros del circuito de Nurburgring.