Buenos Aires. La esposa, hijos y allegados del narcotraficante ecuatoriano José Adolfo “Fito” Macías, líder del grupo Los Choneros, fueron detenidos el jueves por la noche en Argentina y expulsados del país el viernes en la madrugada, dijo la ministra de Seguridad.
Los ocho detenidos habían llegado a Argentina el 5 de enero y se habían instalado en el exclusivo barrio cerrado Country Valle del Golf de la provincia central de Córdoba, a unos 700 kilómetros de Buenos Aires, donde habían comprado una casa en noviembre, informó la ministra Patricia Bullrich.
“Hoy ya el avión de la Fuerza Aérea (Argentina) está aterrizado y la familia del narcotraficante, que tenía una serie de causas en Ecuador, está en territorio ecuatoriano. Fue una operación de alta precisión”, dijo Bullrich en una rueda de prensa, donde aclaró “no tener información ni indicios” de la presencia de “Fito” en el país.
“Esto significaba para Argentina una situación de enorme peligro (…) Nuestra hipótesis es que el plan (de “Fito”) era comprar la casa, sacar la familia y luego escaparse de la cárcel”, agregó Bullrich, quien dijo que había registros de entradas previas de la familia al país.
La ministra informó que la investigación comenzó luego de que las autoridades ecuatorianas alertaran a Argentina de que la familia y allegados de “Fito” estaban escondiéndose en Córdoba.
Macías, quien fue condenado en 2011 a 34 años de prisión por delitos que incluían asesinato y tráfico de drogas, se fugó el 7 de enero de la cárcel donde cumplía su condena, según la policía ecuatoriana.
Los Choneros que lidera “Fito” es una organización criminal que las autoridades han vinculado con extorsión, asesinato y tráfico de drogas, entre otros delitos, y a la que acusan de controlar las principales cárceles del país.
Daniel Noboa, el presidente ecuatoriano de 36 años que asumió el cargo en noviembre pasado, declaró un estado de emergencia de 60 días, permitiendo patrullas militares y estableciendo un toque de queda nocturno a nivel nacional, mientras el país intenta recuperarse de una ola de violencia.
Los incidentes ocurridos en enero incluyeron un ataque de hombres armados contra el canal de televisión TC, la toma de rehenes de más de 200 funcionarios penitenciarios y el secuestro de agentes de policía, además del asesinato de un fiscal que se encargaba de perseguir casos de crimen organizado.
Organizaciones criminales rivales se enfrentan con frecuencia en las superpobladas prisiones de Ecuador y datos oficiales muestran que más de 400 detenidos murieron desde 2021.
“Argentina no va a ser un narco-país ni nuestras provincias van a ser guarida de delincuentes. Estamos decididos a combatir este tipo de delitos”, afirmó en la rueda de prensa el ministro del Interior, Guillermo Francos.