Ciudad de México. Con los votos de Morena y sus aliados, la Cámara de Diputados avaló este miércoles la expedición de una nueva Ley General de Adquisiciones, Arrendamientos y Servicios del Sector Público, luego de un debate en el cual se aprobó una reserva presentada por los partidos de mayoría para ampliar las causales por las que se pueden otorgar contratos públicos por adjudicación directa.
El dictamen fue aprobado por 329 votos en favor –de Morena, PT y PVEM– y 118 en contra –de PAN, PRI y MC–, en medio de acusaciones mutuas entre los bloques legislativos de haber permitido la corrupción y la opacidad en sus respectivos gobiernos.
Luego de que aprobara en lo general la propuesta –que también implica modificar diversas disposiciones de las leyes Federal de Austeridad Republicana, General de Sociedades Cooperativas y de la Economía Social y Solidaria—, comenzó el debate de un total de 85 reservas, en voz de más de 30 oradores.
La primera de dichas observaciones fue expuesta por la morenista Claudia Rivera Vivanco, quien propuso cambios en cuatro artículos del dictamen, para ampliar los periodos de firma de contratos una vez que se hayan adjudicado, y autorizar la asignación directa de obras y servicios también para personas físicas.
Además, para ratificar que las dependencias y entidades gubernamentales podrán asignar contratos “sin sujetarse al procedimiento de licitación pública”, sino únicamente a la invitación a cuando menos tres personas o a la adjudicación directa.
Cruce de acusaciones de corrupción
El cambio aceptado generó diversas críticas desde la oposición, como la expuesta por Margarita Zavala (PAN), quien alertó: “lo que está haciendo esta reserva es ampliar todavía más las excepciones a las licitaciones. La ley debería cuidar que esos espacios de corrupción se estrechen, no se ensanchen. Y esta reserva todavía ensancha más las posibilidades de corrupción”.
El también panista Éctor Jaime Ramírez Barba incluso aseguró que la reserva no había sido elaborada por los diputados morenistas que la firmaron y criticó otros aspectos de la misma, como la ampliación del periodo que tienen las dependencias gubernamentales para firmar contratos, al pasar de 15 días naturales a 15 días hábiles.
“Está sobre las rodillas que la gran propuesta es cambiar de 10 o 15 días naturales a 15 días hábiles. ¿Y de dónde sacaron ese promedio? ¿Cuántas veces han fallado? Les voy a decir cuántas. Para la bienal de medicamentos 2025-2026 debieron haber sacado su licitación en octubre. Bueno, estamos ya en abril y no han terminado de asignar los medicamentos”, reprochó.
En tono irónico, Asael Hernández Cerón (PAN) alertó que Morena y sus aliados “lo que quieren es legalizar sus atracos, sus bisnes. Ya no quieren licitar, lo que quieren es asignar contratos de manera discrecional a todos sus cuates. Es una cadena que se entrelaza: primero la desaparición del INAI, para que nadie pueda tener acceso a la información, y ahora la opacidad en la asignación de contratos”.
En respuesta, Ana Karina Rojo Pimentel (PT) llamó a que “cada quien responda a sus hechos. Y lo digo porque los prianistas son muy capaces de decir cómo se lleva a cabo la corrupción, lo han venido a explicar aquí, porque durante 36 años y más lo han hecho. No se nos olvide quien es hoy su presidente del PAN, que fue quien estuvo de acuerdo con el cartel inmobiliario aquí en la Ciudad de México, Jorge Romero Herrera”.
De igual forma, recordó que “durante años el presupuesto se convirtió en una piñata, se licitaba para aparentar, se asignaba por dedazo, se facturaba sin vergüenza y se simulaba competencia entre empresas creadas con el mismo notario. ¿Eso les suena?”
Margarita García (PT) aseguró que la aprobación de la nueva ley acabará con los “grandes negocios del PRIAN” en la asignación de contratos públicos, como el firmado en 2010 por el ex presidente Felipe Calderón mediante el cual se le encomendó a seis empresas privadas la construcción de ocho cárceles, por más de 3 mil 400 millones de pesos. Dichos contratos, dijo, están siendo investigados por la FGR por presuntas irregularidades.
En una intervención posterior, García increpó con tono molesto a la panista Carmen González: “¡por todo estás enojada, hasta por el día en que nacistes (sic)! Ve con un sicólogo, para que te quite el trauma y para que a lo mejor hasta tu voz mejore, diputada”.
Tras la aprobación de la nueva ley se envió al Senado para su ratificación legislativa.