Ciudad de México. Ante los impactos negativos en los ecosistemas marinos y formas de vida de las comunidades por los proyectos extractivistas de hidrocarburos en el Golfo de México, organizaciones y colectivos defensores del medio ambiente de cuatro estados del país demandaron al gobierno federal que adopte un nuevo modelo de desarrollo que no esté basado en la explotación de recursos naturales.
En conferencia de prensa, 40 organizaciones y colectivos, entre ellos, Oceana, Comité de Manejo de la Zona de Refugio Pesquero Punta del Tigre (Campeche), Red del Corredor Arrecifal del Golfo de México (Veracruz-Tabasco), señalaron que además de las afectaciones ambientales de estas prácticas hacia los arrecifes y manglares, también están la pérdida de empleos, desplazamientos de comunidades, daños en la piel y alergias por el agua contaminada, erosión de playas y consecuencias en la pesca.
En el marco de la Conferencia de Naciones Unidas sobre Cambio Climático (COP-30), que se realizará en dos semanas en Brasil, elaboraron una propuesta con siete puntos clave para la restauración de ecosistemas, que cada colectivo, dijeron, entregó en las oficinas de la Presidencia de la República a través de cartas.
Algunos de los puntos son remover embarcaciones petroleras varadas en las costas que contaminan y alteran la dinámica costera. Generar estrategias de restauración de ecosistemas y reparación del daño causado por derrames de hidrocarburos en territorios costeros. Crear programas de financiamiento para la conservación de tortugas marinas con recursos permanentes. No impulsar proyectos que afecten nuestra salud y la de los nuestros territorios como el gasoducto Puerta del Sureste o el fracking.
Los colectivos explicaron cómo la contaminación por hidrocarburos en los mares y ríos ha afectado su modo de vida. El Comité de Manejo de la Zona de Refugio Pesquero Punta del Tigre comentó que en Isla Aguada, Campeche, ante la presencia de crudo en las costas, las especies que pescaban han disminuido, por lo cual, parte del sector laboral busca en el turismo una nueva forma de empleo.
Señalaron que hay 15 millones de habitantes que residen en los estados costeros del Golfo, aún así, “se ha priorizado el desarrollo de empresas y de las industrias a costa de los ecosistemas marinos con impactos directos en las comunidades que dependen del mar”.
