Ciudad de México. Escuchar música no sólo es un fenómeno auditivo y emocional, sino también motor: “Lo hacemos con nuestros músculos”, escribió Nietzsche.
Y los tejidos musculares fueron los que sostuvieron a los miles de asistentes al festival Corona Capital, que se realiza en el Autódromo Hermanos Rodríguez desde el viernes y hasta mañana.
Fans del rock, pop, y demás géneros actuales se dieron cita en la Magdalena Mixhiuca desde temprana hora de este sábado y hasta esta noche, no dejaron de moverse de un escenario a otro.
Cinco proscenios los esperaban para llegar al mejor lugar, al sitio más cercano en el que puedan gozar con esa energía intangible que mueve a todos, la música en vivo.
Uno de los que abrió la jornada fue The Aquadolls, banda de California que presentó su álbum debut en diciembre de 2014. Con un sonido que retoma mucho las guitarras del siglo pasado, calentó más la tarde.
El encuentro siempre cumple con su cuota de género abriendo los tablados a creadoras como el de la cantante y compositora de R&B y pop alternativo, UNA MIA, con una voz que dejó atónitos a muchos.
También apareció MICHELLE y su R&B vibrante desde Nueva York. Son cuatro chicas que cantan y contonean su cuerpo al ritmo de temas pop que detonaron la creación de nuevos seguidores, como lo comentaron algunos presentes en su concierto.
Desde Vancouver, Canadá, llegó el sonido excéntrico y onírico de Ekkstacy, con una especie de post punk guitarrero que removió la cerilla de algunos.
La estridencia de Black Pumas se hizo presente enloqueciendo a la muchedumbre. El dúo originario de Austin, provocó una reacción explosiva y entusiasta como su propia música.
Crystal Fighters, banda inglesa-española, de indie rock y electrónica, llegó con sus sonidos policromaticos tanto como su atuendo. Formada en 2007 en Londres, Inglaterra y en Navarra, España, presentó su mezcla de ritmos y culturas.
“Cómo están chilangos”, gritó en español Anne Erin Clark, conocida como St. Vincent, quien fue una de las esperadas y acumuló una gran cantidad de fans en el escenario principal.
La cantautora y multiinstrumentista, ganadora de premios Grammy, mostró su soft rock, indie, pop barroco, hasta un electropop traslúcido.
Caída la tarde y los ánimos de elevaron quizá por la sed mala, ésa que hace que se consuma el producto de la cebada, así como del etil. Algunos lo consumían como agua.
Los beats, los gritos, las selfies, el desmadre sano alimentaban cada rincón del Autódromo Hermanos Rodríguez, sede del festival.
Mientras, otra voz femenina destacaba. La de Jorja Smith, cantautora británica que ha lanzado varios sencillos desde enero de 2016 y colaborado con importantes, vino a México a conquistar con su pop irresistible.
Este sábado, la jornada terminaría hasta la 1 de la mañana habrían disfrutado a consagrados como New ya habrían disfrutado a consagrados como New Order, Primal Scream y Shawn Mendes.