Nueva York y Washington. Donald Trump tiene cita este lunes en un tribunal de Nueva York donde será el primer ex presidente estadunidense en la historia en ser sujeto a un juicio criminal, el primero de los cuatro procesos criminales en su contra.

Los fiscales de Nueva York en este proceso local han acusado a Trump de 34 cargos relacionados con falsificar informes financieros para encubrir pagos a cambio de silencio de una estrella pornografica en el 2016 y de otras dos personas, y son delitos graves porque fueron parte de una maniobra para ocultar de los votantes información dañina al candidato.

Los cargos implican una sentencia de hasta cuatro años de prisión, pero todo indica que aun si es declarado culpable no será encarcelado.

El virtual candidato presidencial republicano esta logrando convertir esto en un espectáculo político en beneficio de su campaña. Y si gana – tal como algunas encuestas por ahora indican – podría ser el primer criminal condenado en ocupar la Casa Blanca.

Como siempre ha sido su estrategia ante las múltiples acusaciones en su contra a lo largo de su vida adulta, Trump está acusando a sus acusadores. Ha afirmado que este, como los otros casos en su contra, son parte de un magno esfuerzo de los demócratas y “la izquierda radical” de “politizar” el poder judicial para evitar que gane las elecciones y se ha proyectado como un mártir por la causa (la suya). Repite que es “una cacería de brujas política” y una “interferencia electoral”.

En este caso en particular, y a pesar de prohibiciones impuestas por el juez Juan Merchan, Trump ha continuamente atacado al juez, los fiscales y a los testigos en el caso, incluyendo a sus familias. Acuso al fiscal de seguir ordenes del presidente Joe Biden, y a la hija del juez como una operativa demócrata. También ha atacado a uno de los principales testigos, Michael Cohen, quien fue uno de sus abogados personales y que se encargo de los pagos encubiertos.

El sábado, en un mitin de su campaña electoral declaró que este es un “juicio amañado comunista”, pero que es “un honor” ser acusado, ya que “estoy orgulloso hacerlo por todos ustedes” dijo a sus fanáticos como si fuera un líder político perseguido defendiendo su movimiento.

Trump ha logrado postergar los otros tres juicios criminales pendientes en su contra con todo tipo de maniobras legales. Este es considerado el menos dañino para su candidatura, aunque es el único que esta procediendo por ahora antes de la elección. Los otros giran en torno a cargos de interferencia electoral (uno federal, otro estatal) y manejo ilegal de documentos oficiales secretos.

Si Trump gana la presidencia puede auto-indultarse en los dos casos federales, pero no en los locales como el que inicia este lunes en Nueva York, ni el otro en Atlanta que por ahora esta en espera. Pero aún si es declarado culpable en cualquiera de estos otros casos, al igual que el que inicia en Nueva York, la Constitución no prohíbe que sea presidente.

Trump ha perdido dos de los casos civiles en su contra a principios de este año, ambos en Nueva York. El primero concluyó a favor de una mujer que lo acusó de difamación en torno a sus acusaciones de que había sido sexualmente violada por él, con una orden judicial de pagar 83 millones de dólares. El segundo fue por fraude empresarial que culminó con una orden para pagar 454 millones de dólares – fallo que ahora está apelando. Pero los casos civiles solo implican dinero, los criminales pueden concluir con penas de cárcel.

Por ahora, Trump está obligado, como el acusado en un caso criminal, de estar presente durante todo el juicio, aunque puede solicitarle al juez permiso para ausentarse si es necesario. Pero se supone que estará presente la mayoría del tiempo – el juicio está programado para sesionar cuatro días a la semana y durar posiblemente 6 a 8 semanas – y con ello, su campaña electoral se mudará a esta ciudad. Se espera que pernoctará en su departamento en la Torre Trump en la Quinta Avenida, y que programará eventos de campaña los fines de semana.

El juicio se convertirá en parte de su campaña, y los medios nacionales, junto con la policía y el Servicio Secreto, ocuparán las banquetas frente al tribunal, y tal vez tanto manifestantes como simpatizantes del ex presidente.

El juicio mismo tendrá elementos de telenovela, ya que los cargos están relacionados a los pagos hechos a la estrella de pornografía Stormy Daniels, quien dice que ella y el acusado tuvieron un breve encuentro sexual en 2006. Más aún, ella ha revelado detalles físicos del encuentro, incluyendo que el pene del ex presidente se parece a un hongo, y que el encuentro fue muy rápido y nada placentero. Trump también pago por el silencio de una ex modelo de Playboy entre otros que formarán parte de este juicio..

La primera etapa del juicio que inicia este lunes es la selección de un jurado compuesto por 12 personas y 6 alternos – proceso que podría durar días.

 

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