A las mujeres con cáncer de mama, las mastectomías –extirpación de uno o ambos senos– no nos mutilan, nos salvan la vida, manifestaron pacientes oncológicas, quienes exigieron un alto a los estigmas hacia ellas. Seguimos siendo mujeres, somos hermosas y no nos falta nada, enfatizaron en el día mundial de esta enfermedad, que se conmemoró ayer.

Reunidas en la llamada glorieta de las mujeres que luchan, en avenida Paseo de la Reforma, donde compartieron sus testimonios, también demandaron a las autoridades que inviertan en la detección temprana y tratamientos. No queremos monumentos pintados de rosa, sino diagnósticos, clamaron.

Como parte de su manifestación para visibilizar y generar conciencia sobre esta enfermedad y sus repercusiones, el colectivo Tetas y Rayas colocó cerca de 3 mil brasieres, donados por mujeres con cáncer de mama, alrededor de la glorieta y sobre las jardineras. Algunas de las prendas tenían flores y mensajes como Estoy viva.

Una sección especial estuvo dedicada a las mujeres que han fallecido a causa de este padecimiento, la cual estuvo representada por brasieres color negro y las fotografías de las pacientes.

¡Queremos que nos vean! Estamos hartas de que nos miren como un pedazo de carne enferma, reprochó Karina da Silva.

En entrevista, acentuó que las mujeres con esta enfermedad son más que el cáncer y que sus senos. El que te quiten las mamas es un acto de vida, de querer sobrevivir. Hay quienes piensan que no somos más que un par de chichis, pero somos mujeres, mujeres oncológicas, que no dependemos de eso.

Indicó que estos estigmas están entre los mismos médicos. En su caso, compartió que el doctor que la atiende lo primero que le comentó es que podía reconstruirse. “Le pregunté: ‘¿y si no quiero?’, me respondió que no era normal, que 99 por ciento de las mujeres se reconstruyen. Yo le dije que quiero ser del 1 por ciento que no, porque a mí lo que me importa es estar viva, poder celebrar con mi hijo, con mi familia y vivir muchos años más”.

El colectivo Tetas y Rayas invitó ayer a conmemorar la lucha y conciencia contra el cáncer de mama. Foto Yazmín Ortega Cortés

Lorena Estrada de 29 años, alertó sobre el hecho de que las mujeres jóvenes también pueden sufrir esta enfermedad, como en su caso, que fue diagnosticada a los 23 años, después de dejar de amamantar a su hija.

Expuso que tardó 18 meses en recibir el diagnóstico por el estigma de que el cáncer de mama no da a los jóvenes. Después de cinco años estoy con metástasis, sobreviviendo día a día al estigma de ser una paciente enferma.

Ante esas ideas erróneas, subrayó que las mujeres oncológicas también somos útiles y queremos continuar con nuestra vida. No vamos a seguir como las mujeres que éramos antes, pero queremos tener un espacio donde nos puedan contratar y seguir siendo productivas.

Refirió que según cifras oficiales del 2023, en ese año se detectaron 25 mil 190 casos de cáncer de mama, de los cuales 24 mil 609 fueron mujeres y 581 hombres. En ese tiempo, dijo, fallecieron 547 mujeres de entre 15 y 39 años de edad.

Al 28 de septiembre de 2024 se han diagnosticado 21 mil 330 nuevos casos, la mayoría de féminas, añadió.

María de los Ángeles Arriola pidió frenar la violencia estética y que las autoridades federales brinden mayores recursos para diagnósticos oportunos y tratamientos.

En su caso, mencionó que por la pandemia de covid-19, entre el 2019 y 2020, dejó de realizarse periódicamente mastografías, por lo que fue en 2021 cuando la diagnosticaron. “Me propuso el médico quitarme el pecho de lado izquierdo, y yo dije: ‘está bien’, porque con ello tengo más del 80 por ciento de probabilidad de que no regrese el cáncer”. 

Compartir