El gobierno federal señaló que la causa principal del desabasto en medicamentos en los estados es por “errores en la programación de la demanda remitida al gobierno federal”, es decir, que las entidades no piden los fármacos que realmente necesitan.

Así se expuso en una de las láminas de la presentación que durante la mañanera presidencial realizó el director general del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Zoé Robledo, en torno a la situación de los medicamentos, donde detalló que en diciembre pasado se tomó la decisión que la empresa estatal Laboratorios Biológicos y Reactivos de México (Birmex) será el único distribuidor.

“Los estados solicitaron un 15 por ciento menos de las claves utilizadas en las unidades médicas, y un 266 por ciento de la cantidad necesaria para la atención de la población usuaria”, se apunta en la lámina.

Robledo afirmó que con la operación del IMSS-Bienestar en 23 entidades del país, los servicios de salud para personas sin seguridad social se han federalizado, por lo que cambió el modo de solicitar las medicinas.

“Se compraron todas las piezas, todas las claves, ahora tenemos que tener todos los volúmenes y es en que tenemos que concentrarnos en lo que sigue. En ese sentido la llegada de IMSS-Bienestar cambia por completo el sistema como antes no sólo se compraban sino se distribuían y ahora se recetan los medicamentos”, aseguró.

Planteó que con el actual gobierno se ha cambiado la forma en cómo se adquieren y distribuyen los medicamentos, pues en la pasada administración federal se favoreció a 10 empresas que concentraron 80 por ciento del total, con una suma de

La decisión se tomó luego que en administraciones pasadas existía una “simulación” en la compra y distribución de estos productos, donde se daba preferencia a sólo diez empresas que obtenían ganancias por 241 mil millones de pesos.

De ahí, que una de las decisiones del gobierno de López Obrador sea que ahora Birmex se encargue de estos objetivos.

El titular del IMSS, detalló que esta empresa estatal será la que planeará las siguientes compras consolidadas, las almacenará -destacando la construcción de la Megafarmacia del Bienestar, en Huahuteoca, estado de México – y será quien también la distribuirá.

“A partir del 22 de diciembre del año pasado, Birmex es la empresa que planea las siguientes compras, las siguientes adquisiciones que se tuvieran que hacer, las consolida, es quien además almacena y justamente con las capacidades que tiene la Megafarmacia, además de sus posibilidades de compensar entre instituciones cuando una no tiene para poder entregar en otra institución, pero también distribuye y esto es muy importante: la distribución ya en manos de un organismo del gobierno, del Estado mexicano pues nos va a garantizar la distribución, incluso hasta la última milla, es decir, hasta la última unidad médica rural, en algún lugar apartado, pues ahí va estar Birmex”, planteó.

Dijo que esto se ha venido desarrollando desde octubre del año pasado y en diciembre se concretó el paso para que Birmex sea el único distribuidor del sector público: IMSS, ISSSTE e IMSS-Bienestar.

Al respecto, el presidente López Obrador planteó que el origen de los ataques contra su administración, en especial por la puesta en marcha de la magafarmacia, es que se arrebató el negocio de la compra de medicamentos a las diez empresas que hasta el sexenio pasado eran las beneficiarias.

En el caso de la megafarmacia, subrayó, “fue como si se tratara de una bodega para comprar y distribuir fentanilo. ¡Todo un escándalo! Por los intereses en la distribución de medicamentos”.

Destacó que ahora será Birmex la que se encargue de la planeación de las compras y la distribución.

“Se acabaron los privilegios de unos cuántos, pero afortunadamente se ha ido avanzando y vamos a seguir con lo mismo”.

 

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