Ciudad de Panamá. Unos 302 mil migrantes, en su mayoría venezolanos, cruzaron durante 2024 la selva panameña del Darién en su marcha hacia Estados Unidos, 41 por ciento menos que el año anterior, anunció este jueves el presidente de Panamá, José Raúl Mulino.

Este descenso se registra a menos de tres semanas de que asuma la presidencia de Estados Unidos, Donald Trump, quien ha prometido deportaciones masivas.

“Hemos logrado una reducción del 41% en el flujo de inmigrantes que atraviesan la selva del Darién”, en la frontera con Colombia, dijo Mulino en un discurso de apertura del periodo de sesiones del Congreso panameño.

Según cifras del Servicio Nacional de Migración, en 2024 atravesaron el Darién 302 mil 203 personas, frente a las 520 mil 85 en 2023.

La selva panameña se ha convertido en un corredor para los migrantes que, desde Sudamérica, tratan de llegar a Estados Unidos. En su mayoría son venezolanos, aunque también hay colombianos, ecuatorianos, chinos y haitianos, entre otros.

En esa travesía, enfrentan peligros como ríos caudalosos, animales salvajes y grupos criminales que les roban, violan y matan, según organismos internacionales.

“Hoy se trabaja día a día para que esa migración ilegal no llegue aquí a la ciudad (capital) o al resto del país”, afirmó Mulino.

El gobierno panameño atribuye este descenso al cierre de algunos senderos en la selva y a la ayuda de Washington, que financia vuelos de repatriación de migrantes mediante un acuerdo firmado en julio.

Con este programa, que contempla un aporte estadunidense de seis millones de dólares, Panamá ha deportado a más de mil 500 migrantes en una cuarentena de vuelos hacia Colombia, Ecuador e India.

Sin embargo, esa medida no incluye a venezolanos, a los que Panamá deja seguir hacia Estados Unidos ya que Caracas no permite la llegada de vuelos procedentes del país centroamericano.

Existe un “problema logístico con Venezuela, pero sus migrantes avanzan hacia el norte de Centroamérica como corresponde y respetándole por supuesto todos sus derechos humanos”, señaló Mulino.

El presidente panameño afirmó el 19 de diciembre que en 2024 al menos 55 migrantes murieron y 180 niños quedaron abandonados mientras cruzaban el Darién.

Las autoridades panameñas sospechan que las cifras de muertos pueden ser mayores ya que muchos cadáveres no se pueden recuperar por lo inaccesible del terreno o porque son devorados por animales.

 

Compartir
Exit mobile version