Johannesburgo. Botsuana se sumará a Bélgica como centro de verificación y certificación de las exportaciones de diamantes en bruto hacia los países del G7, anunció este jueves la presidencia.
Tras la prohibición de los diamantes rusos por parte del G7 en enero, Amberes fue designada en marzo como el único lugar autorizado para certificar el origen de los diamantes en bruto y emitir los certificados del G7.
Botsuana, el mayor productor africano de diamantes y el segundo a nivel mundial después de Rusia, indicó este jueves que espera convertirse en el segundo centro de certificación a principios de 2025.
Esta decisión se tomó después de la “enérgica protesta” contra el sistema de centro único, considerado “injusto, restrictivo, costoso y perjudicial para la economía” de Botsuana, según el comunicado de la presidencia.
Un equipo técnico del G7 especializado en diamantes, señaló que también está “en conversaciones con otros países africanos productores como Namibia y Angola para establecer centros adicionales de certificación”.
La próxima inclusión de Botsuana “volverá a posicionar al país como una referencia mundial” en la producción de diamantes, ponderó el portavoz del gobierno, Montlenyane Baaitse, en un comunicado.
Los ingresos y los intercambios relacionados con los diamantes disminuyeron en países como Botsuana, cuya tasa de crecimiento pasó de 5.5 por ciento en 2022 a 2.7 por ciento en 2023, según el Fondo Monetario Internacional.
Las piedras preciosas constituyen la principal fuente de ingresos de Botsuana, y representan alrededor de 30 por ciento de su producto interno bruto (PIB) y 80 por ciento de sus exportaciones.