Moscú. Al menos 28 personas murieron el sábado en una panadería en Lisichansk, una ciudad del este de Ucrania ocupada por Rusia, en un bombardeo atribuido al ejército ucranio, indicaron el domingo los servicios de emergencia rusos en un nuevo balance.
Lisichansk, en la región de Lugansk, cayó en manos de las fuerzas rusas a mediados de 2022 después de una violenta batalla.
El frente del este de Ucrania apenas se ha movido desde hace meses, pero los combates continúan y los bombardeos de ambos bandos se han intensificado en las últimas semanas.
Las operaciones para encontrar víctimas bajo las ruinas de la panadería continúan este domingo, indicaron los servicios de emergencia rusos.
“Alrededor del 65% de la estructura destruida ha sido desmantelada (…) Lamentablemente, 28 personas, incluido un niño, han muerto”, dijo el ministerio de Situaciones de Emergencia ruso en Telegram.
Los equipos de rescate sacaron hasta ahora a diez personas de entre los escombros, según la misma fuente.
Según las autoridades sanitarias locales, citadas por la agencia de noticias rusa TASS, cuatro sobrevivientes están “muy graves”. Entre los fallecidos hay 18 hombres y nueve mujeres.
Ucrania no ha respondido a las acusaciones de haber efectuado el bombardeo y el Estado Mayor ucraniano se limitó a decir el domingo que su aviación alcanzó el sábado “12 zonas de concentración enemigas”.
Los misiles ucranianos también atacaron “una pieza de artillería” y otra “zona de concentración de fuerzas”, agregó esta fuente.
Día de duelo
Lisichansk, una ciudad a 15 km del territorio controlado por Ucrania, tenía 111.000 habitantes antes del inicio de la ofensiva rusa, en febrero de 2022.
Las fuerzas rusas tomaron el control a mediados de 2022, al igual que la de ciudad adyacente de Severodonetsk, tras una de las batallas más brutales del conflicto hasta ahora.
El gobernador instalado por las autoridades rusas de la región de Lugansk, Leonid Pasechnik, anunció el domingo en Telegram un día de luto en este territorio ocupado.
Pasechnik acusó a las fuerzas de Kiev de atacar la panadería que, según él, siempre está muy concurrida y es conocida por tener pan fresco los fines de semana.
La agencia de noticias rusa RIA Novosti publicó un video de un edificio destruido, donde se ve a los socorristas sacando un automóvil completamente aplastado de los escombros. El edificio de una sola planta, con un letrero con el nombre “Restaurant Adriatic”, parece completamente en ruinas.
Según el ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia se utilizaron armas occidentales en el bombardeo y pidió una “condena rápida e incondicional” de las organizaciones internacionales.
En las últimas 24 horas, el Estado Mayor ucraniano afirmó que se habían producido 66 enfrentamientos armados en el frente y que Rusia llevó a cabo dos ataques con misiles, 65 bombardeos y 53 ataques con lanzacohetes múltiples.
Por su parte, el gobernador de la región rusa de Bélgorod, fronteriza con Ucrania, objeto de ataques casi a diario, dijo que Ucrania lanzó al menos dos drones explosivos el sábado, sin causar víctimas.
Visita al frente sur
Por su parte el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, dijo el domingo que había visitado a las tropas en la pequeña localidad de Robotyne, en el frente sur, que las fuerzas ucranias tomaron en agosto.
“Región de Zaporiyia. Robotyne. Ubicación de la 65 Brigada Mecanizada. Hablé con los defensores, les agradecí y presenté distinciones estatales”, dijo Zelenski en las redes sociales.
Kiev presentó la conquista de Robotyne como un éxito en su contraofensiva contra las fuerzas rusas, pero desde entonces la pequeña aldea ha sido atacada sin cesar por las fuerzas rusas y es uno de los principales puntos calientes del frente sur.
