El seis veces entrenador campeón de Supertazón Bill Belichick llegó a un acuerdo por cinco años para convertirse en el próximo coach del equipo de futbol americano colegial de North Carolina.
La universidad anunció la contratación hoy, poco más de una semana después de que el nombre de Belichick, de 72 años, surgiera como un candidato improbable para reemplazar al coach más ganador en la historia del programa, Mack Brown.
El acuerdo necesita ser aprobado por la junta de gobierno de la Universidad de North Carolina, aunque no se ha anunciado una reunión próxima hasta el miércoles por la noche. Tampoco se ha convocado a una conferencia de prensa de presentación.
“Sabemos que el deporte universitario está cambiando y que esos cambios requieren un pensamiento nuevo e innovador”, dijo el director de atletismo de la UNC, Bubba Cunningham, en un comunicado. “Bill Belichick es una leyenda del futbol americano y contratarlo para dirigir nuestro programa representa un nuevo enfoque que garantizará que el futbol americano de Carolina pueda evolucionar, competir y ganar, hoy y en el futuro”.
La universidad anunció el 26 de noviembre que Brown, el entrenador más ganador en la historia del programa y miembro del Salón de la Fama del futbol colegial no regresaría para una séptima temporada en su segundo periodo en Chapel Hill, un despido que se hizo efectivo después de que Brown entrenara su último juego el 30 de noviembre, una derrota frente a N.C. State.
El cambio de Brown, de 73 años, para contratar a Belichick, de 72, significa que North Carolina está confiando en un coach que nunca ha trabajado a nivel colegial, aunque tuvo un éxito incomparable en la NFL al lado de Tom Brady la mayor parte de su etapa de 24 años con los Patriots de Nueva Inglaterra.
Belichick ha sido relacionado como candidato para trabajos en la NFL desde entonces, siendo el más sonado con los Halcones de Atlanta en enero pasado.
Pero las dos partes habían estado en conversaciones durante varios días trabajando en los términos antes de finalmente llegar a un acuerdo para ponerle fin a lo que parecía un resultado improbable solo una semana antes.