Gaza. Hamas advirtió este sábado que una ofensiva terrestre israelí en Rafá podría dejar “decenas de miles de muertos y heridos” en esta ciudad del sur de la franja de Gaza, último refugio de los palestinos desplazados por la guerra en el territorio.
Varios testigos dieron cuenta en las primeras horas del día de bombardeos en los alrededores de esa localidad, donde viven 1.3 millones de palestinos, es decir, más de la mitad de la población total del enclave. En su gran mayoría, se trata de refugiados que huyeron de los combates en otras zonas del enclave.
En un comunicado, la milicia de Hamás, que gobierna la franja desde 2007, advirtió del riesgo de “una catástrofe y una masacre que podría conllevar decenas de miles de mártires y heridos”.
Además, el grupo afirmó que responsabilizaría a “la administración estadounidense, la comunidad internacional y la ocupación israelí” de las consecuencias.
Previamente, el Ministerio de Salud gazatí había indicado que por la noche se notificaron 110 decesos.
También informó de “intensos combates” en el hospital Al Nasser, de Jan Yunis, en el sur del territorio, donde murió una persona. Aún permanecen 300 empleados, 450 heridos y 10 mil desplazados en el recinto.
El viernes, las fuerzas israelíes allanaron el otro gran hospital de esa ciudad, Al Amal.
Tras pasar por la ciudad de Gaza y por Jan Yunis, las fuerzas israelíes prepararían ahora una operación terrestre en Rafá, fronteriza con Egipto y punto de entrega de ayuda humanitaria.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, pidió a los militares elaborar un “plan combinado” de “evacuación” de civiles de Rafá y de “destrucción” de Hamas en esa ciudad.
“Es imposible lograr el objetivo de la guerra sin eliminar a Hamás y dejando cuatro batallones de Hamás en Rafah”, afirmó el dirigente. Para ello, es necesario que “los civiles evacuen las zonas de combate”, añadió.
En Rafá, Adel al Hajj, un desplazado, dijo que una operación terrestre provocaría “matanzas”. “Ya podemos despedirnos de cualquier [muestra de] humanidad”, añadió.