Caracas. El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, negó este jueves que los detenidos tras las protestas poselectorales fueran “presos políticos”, sino personas que “mataron” y causaron destrucción en esa nación sudamericana.
“Salen (los opositores) a decir que son presos políticos: no son presos políticos, son gente que quemó, que atacó, amenazó, destruyeron y mataron”, expresó Maduro durante una alocución.
Al respecto, acusó a la ONG Provea de trabajar con la estadunidense Agencia Central de Inteligencia (CIA, siglas en inglés), luego de que dicha organización señaló como presos políticos a los detenidos tras las manifestaciones que siguieron a las presidenciales del 28 de julio.
“No es Provea, sino ProCIA, porque Provea trabaja para la CIA desde los años 90, un director de Provea me entregó a mi a la Disip (antiguamente Dirección de los Servicios de Inteligencia y Prevención, reemplazada por el Servicio Bolivariano de Inteligencia –Sebin–) en su época me montó una trampa y me atraparon en las puertas del hotel El Conde”, comentó.
La Fiscalía anunció el lunes que en las últimas semanas fueron excarceladas 533 personas detenidas en el contexto de las protestas poselectorales.
En agosto, la administración Maduro señaló que más de 2 mil personas fueron detenidas en el contexto de las protestas registradas tras los comicios presidenciales del 28 de julio.
Las manifestaciones dejaron 28 muertos y más de mil heridos, según cifras oficiales.