Berlín. El sindicato IG Metall dijo el viernes que los trabajadores de Volkswagen planean ir a la huelga en toda Alemania la próxima semana, en un momento en que el enfrentamiento entre los trabajadores y la dirección sobre los despidos y cierres de plantas se intensifica.
“Las huelgas son posibles y también necesarias desde principios de diciembre”, dijo IG Metall en un folleto a los trabajadores visto por Reuters, y agregó que un acuerdo existente para no realizar paros terminará el 30 de noviembre.
Se espera que las huelgas de advertencia en las plantas del fabricante de automóviles comiencen el lunes en toda Alemania, según personas conocedoras del asunto, lo que serían los primeros paros a gran escala en las operaciones nacionales de la compañía desde 2018.
Las huelgas de advertencia suelen durar desde unas pocas horas hasta un día.
Volkswagen exige un recorte salarial de diez por ciento, argumentando que necesita recortar costos y aumentar los beneficios para defender la cuota de mercado frente a la competencia barata china y la caída de la demanda de autos europeos. También amenaza con cerrar plantas en Alemania por primera vez en sus 87 años de historia.
Los representantes de los trabajadores y la dirección volverán a reunirse el 9 de diciembre para seguir negociando un nuevo convenio laboral para los trabajadores de la empresa alemana -VW AG-, y los sindicatos prometen resistirse a cualquier propuesta que no ofrezca un plan a largo plazo para todas las plantas de la firma.
Las huelgas, que podrían convertirse en paros de 24 horas o ilimitados si no se llega a un acuerdo en la próxima ronda de negociaciones salariales, harán mella en la producción de Volkswagen en un momento en que la compañía ya se enfrenta a la disminución de las entregas y la caída de los beneficios.
“Volkswagen determinará en la mesa de negociaciones la duración y la dureza del conflicto: los trabajadores de VW en todo el país están dispuestos a ir a la huelga”, dijo IG Metall.
Una propuesta de los sindicatos para evitar despidos y cierres de fábricas mediante medidas como la reducción de la jornada laboral y la renuncia a primas constituirá la base de las discusiones. Sin embargo, la dirección afirmó que no está dispuesta a retirar los cierres de plantas de la mesa de negociación.