Moscú. Rusia expresó su “extrema preocupación” por el asalto “inaceptable” a la embajada de México en Quito, informó el ministerio de Relaciones Exteriores ruso, tras recibir este lunes en la sede de la cancillería al jefe de la misión diplomática ecuatoriana, Juan F. Holguín, quien acudió –según ese documento– para “exponer la posición del gobierno de Ecuador en relación con los acontecimientos del 5 de abril en torno a la embajada mexicana”.
En un claro gesto de desaprobación del atropello a la legislación internacional cometida por el gobierno de Ecuador, el comunicado de la cancillería rusa ni siquiera menciona el rango del funcionario que escuchó las explicaciones de Holguín, pero los mensajes cifrados en el lenguaje diplomático ruso dan a entender que no lo recibió ningún viceministro de Relaciones Exteriores.
La posición de Rusia es breve, pero contundente: “Por nuestra parte, expresamos nuestra extrema preocupación por la incursión armada de representantes de las fuerzas de seguridad ecuatorianas en la Embajada mexicana”.
También “reafirmamos nuestro compromiso incondicional con la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas de 1961, que garantiza la inviolabilidad de las sedes diplomáticas, su inmunidad frente a registros, requisas, detenciones y acciones coercitivas. Lamentamos que diplomáticos mexicanos hayan resultado heridos en el incidente”.
El ministerio de Relaciones Exteriores considera “peligrosa” la “interpretación arbitraria de las normas fundamentales del derecho internacional” y, en ese sentido, añade que “cualquier violación bajo uno u otro pretexto de la inviolabilidad de las misiones diplomáticas, ya sea en Estados Unidos, Medio Oriente o América Latina, es inaceptable para nosotros”, aseguró.
“Enfatizamos que Rusia siempre defenderá que América Latina siga siendo una zona de paz, esforzándose por la unidad en su diversidad. Expresamos la esperanza de que los amigos latinoamericanos eviten acciones que puedan traer discordia a las relaciones tradicionalmente no conflictivas de buena vecindad y colaboración y encuentren una solución mutuamente aceptable a la situación actual”, concluyó la cancillería rusa.